En su declaración, la OMS dijo que 759 personas habían sido infectadas en Guinea, Liberia y Sierra Leona.
Las nuevas cifras incluyen casos sospechados, probables y confirmados por laboratorio. Su publicación se produce en la víspera de una reunión regional de dos días en Ghana para mejorar los esfuerzos para combatir la enfermedad.
Un reporte la semana pasada dijo que había habido 367 muertes, ya mucho más que en el previo brote más letal, que mató a 254 personas en Congo en 1995.
La enfermedad se ha contagiado fácilmente debido a la desconfianza hacia los trabajadores de salud, las densas migraciones y la llegada de la enfermedad a las capitales de Liberia y Guinea.